Si este vino me fuera servido en una cata a ciegas y me preguntaran cuàntos años tiene, dirìa que a lo sumo tiene cinco o seis tal vez. Con 18 años encima, el Reserva del Virrey Tannat 1998 de Familia Irurtia no tiene grandes señales de evoluciòn en su color, bordeaux oscuro casi negro con ribetes purpùreos que aparentan ser de esta dècada o como mucho, de finales de la anterior.
En aroma es algo austero al principio y hay que saber esperarlo. Obviamente hay que decantarlo para permitirle abrirse y tambièn para dejar los sedimentos que ha formado a lo largo del tiempo dentro de la botella. Luego de unos cuantos minutos comienzan a aflorar aromas a frutas negras pasas, tè negro, tabaco, madera, especias y pasas de uva maceradas.
En boca es amplio, seco y con sabores complejos que confirman las frutas negras halladas en nariz. Se suman tonos terrosos y taninos aùn claramente presentes. De final prolongado y retrogusto a tè negro, tabaco y especias.
Una prueba màs del potencial de guarda que puede tener un Tannat. Este ejemplar sin dudas tiene para al menos seis años màs. Los invito a comenzar a probar vinos de esta edad para ver en què se convierte una bebida que es un ser vivo dentro de una botella. En ese camino de pruebas podemos llevarnos decepciones por supuesto, pero sin dudas las ocasiones de victoria como es este caso, nos haràn olvidar cualquier mal trago. Salud!
